El Administrador de Fincas

El Administrador de Fincas Colegiado es un Profesional liberal que de forma habitual, continuada y retribuida,  presta servicios de administración y asesoramiento a los propietarios de bienes inmuebles, ya sean estos rústicos o urbanos, administrando sus alquileres, gestionando las comunidades y desarrollando una actividad de gran valor socioeconómico que afecta, de forma directa, práctica y cotidiana, a la vida de los ciudadanos.

FUNCIONES DEL ADMINISTRADOR DE FINCAS COLEGIADO

Gestionar, conservar y rentabilizar los bienes

El Administrador de Fincas gestiona los inmuebles de terceros con criterios profesionales, consciente de su valor como bien de inversión y ahorro o legado familiar.

Se ocupa de gestionar la propiedad inmobiliaria con el fin de mantener su valor y buscando  la mejora constante.

Mediar

Tiene la capacidad de mediar entre propietarios, inquilinos o vecinos de una Comunidad.

Aplicar la legislación

Interpreta y aplica la legislación vigente.

Resolver conflictos

Busca soluciones a situaciones que se generen en las relaciones de convivencia o arrendamientos de manera rápida y eficaz.

Representar

A la propiedad y a las comunidades de propietarios en todos los casos que profesionalmente les corresponda.

Administrar Comunidades de propietarios

Asesorando en el cumplimiento de la normativa legal, aconsejando en sus decisiones, velando por su buen funcionamiento y cumpliendo rigurosamente los acuerdos de las juntas.

Administrar el arrendamiento

Gestiona el alquiler en todos sus aspectos, garantizando la habitabilidad del inmueble para los consumidores y usuarios, buscando al inquilino adecuado, formalizando el contrato correspondiente, depositando la fianza, cobrando y actualizando las rentas, pagando todos los gastos que graven la finca y haciendo un control de los cobros.

Valoraciones y tasaciones

Los administradores de fincas en su calidad de peritos podrán hacer mediaciones inmobiliarias, tasaciones y valoraciones.